17 de enero de 2007

EL RATÓN Y EL GATO


Ante su enemigo fiero, un gatazo tunantón, solapado y marrullero, así decía a un ratón asomado a su agujero:
- Si el mismo soplo divino nos dio la vida a los dos, ¿por qué estorbas mi camino? ¿por qué has de ser mi asesino? ¡Gato, por amor de Dios! ¿por qué perseguirme así?
+ Si quieres charlar un rato, ratón, acércate a mi.
- Gracias. Estoy bien aquí. No me la da ningún gato.
+ Perjudicarte no quiero. Sal de tu oscuro agujero.
-Perdona que me resista. Yo soy un contrabandista y tú eres carabinero. Alimento no me dan, señor gato, y yo, por eso, en cuanto a dormir se van, busco miguitas de pany cortecitas de queso.
Pero tú eres un ladrón que roba por afición, y aunque te dan tu comida, si algo ves por el fogón, le echas la zarpa en seguida.¿Por qué me has de perseguir en cuanto llego a salir?Ya que nadie me mantiene, ¿un pobre ratón no tiene el derecho de vivir?Protestando del destino, yo de mi suerte abomino y por los abusos no paso. ¡He dicho, señor minino, y me escondo, por si acaso!
El gato se sonrió, relamiéndose de gusto. Los bigotes se atusó y el ratón, muerto del susto, de este modo contesto:
- Contra el alarde insensato de tu discurso barato, con esta razón replico: ¡Si fuera el gato mas chico que el ratón, pobre del gato!No discurras imprudente, con tu discurso elocuente, escóndete en tu agujero y no busques, inocente, justicia en el mundo entero. Desengáñate simplón: la fuerza aquí es la razón, y en este mundo insensato es preciso nacer gato. ¡Lo triste es nacer ratón!

1 comentario:

Anónimo dijo...

felicidades como os lo currais,animo,y segir con la idea que es muy buena.ahora no me acuerdo... pero esto no se aacabado...me gustaria poneros un pareado,aunque fuese copiado...